Homenaje a Jane Vanini: revolucionaria e internacionalista.

Foto: Lorenzo Arenas, Concepción. El domingo 5 de diciembre 2021, se realizó una jornada político cultural en memoria de la revolucionaria internacionalista Jane Vanini.

Concepción: Instalan placa en memoria de combatiente brasilera Jane Vanini a 47 años de su caída.

Por Colectiva La Zarzamora.

El pasado domingo 5 de diciembre, en la plaza ubicada en pasaje 12 con pasaje 21, en Lorenzo Arenas, se realizó una jornada político cultural en memoria de Jane Vanini, mujer brasilera internacionalista, quien cayó en combate hace 47 años, tras 3 horas en enfrentamiento armado contra fuerzas de la Marina. En el lugar la colectiva Jane Vanini, junto a compañeras y compañeros de lucha de la combatiente, instalaron un monolito con una placa conmemorativa que recuerda el lugar donde entregó su último aliento por la libertad.

La actividad, que comenzó a eso de las 16 horas, contó con la presencia de al menos unas 40 personas entre las que se encontraba parte de la colectiva de mujeres sobrevivientes de la dictadura cívico militar, Urdiendo Memorias y ex combatientes del MIR, que compartieron con Jane durante su paso por Concepción.

Emotivo fue el relato de Rosa Montoya (Ochy) compañera de lucha y amiga de Jane, con quien habitó en Santiago y luego en Concepción oponiendo férrea resistencia a la represión militar. Desde sus recuerdos destacó la audacia y valentía de Vanini, su experiencia en la organización estudiantil brasilera y sus convicciones intransables.

«En 1973 ella llega a Chile tras la dictadura de João Goulart en Brasil, junto a un grupo de compañeras y compañeros brasileños, en calidad de refugiada política. Después de haber participado activamente las luchas estudiantiles de Brasil fue parte de la resistencia armada… mientras duró su calidad de refugiada política acá en Chile, fue trabajadora de la revista punto final y paralelo a ello se integró a la orgánica del Movimiento de Izquierda Revolucionario MIR. El 11 de septiembre de 1973, irrumpe el golpe militar y tu Jane, Gabriela -nombre político- haces la opción de quedarte en Chile para sumarte a la resistencia, asumiste la clandestinidad y allí fue donde la vida se encargó de juntarnos. Los días corrían vertiginosos y desde entonces cada minuto, cada segundo, nos hizo inseparables»

Ochy, compañera de lucha de Jane Vanini, en su paso por Chile.

De la misma manera Héctor Sandoval, parte del MIR penquista de los años 70, relató lo difícil que ha sido descubrir qué ocurrió con Jane, cómo buscaron pista por pista para re-construir la historia, los obstáculos judiciales, las informaciones falsas y el actual congelamiento de la causa. El «chacha» destacó también el valor de la compañera, instalándola como un ejemplo de lucha, con igual o mayor importancia que personajes emblemáticos de la resistencia armada.

«Fue inicialmente un colectivo de compañeros del MIR que habíamos sido prisioneros políticos, los que nos organizamos y decidimos iniciar en la región, el rescate de la memoria de los compañeros nuestros que habían caído durante la dictadura, ya que la mayoría no tenía justicia…a medida que iban apareciendo las fechas, íbamos a esos lugares y hacíamos lo que podíamos por instalar y dar a conocer que ahí había muerto alguien en manos de la dictadura, por ofrecer resistencia a esta tiranía. Y nos encontramos en el andar con el caso de Jane Vanini…Decidimos abrir una querella para investigar qué pasó con ella, ¿dónde estaba? y desarmamos el camino para atrás, desde cuando ella ofreció resistencia aquí. Vinimos y empezamos a entrevistar a todos los vecinos de uno por uno, ¿qué sabían? ¿qué había pasado? Después entrevistamos a los compañeros que habían estado prisioneros en la Base Naval en la misma época, después entrevistamos a personas que habían tenido vínculos en ese momento en que ella desaparece, después que se la llevan herida y se van abriendo los procesos contra todo el equipo del SIRE y del Arca 5 de la Base Naval» Héctor Sandoval, en conmemoración de Jane Vanini.
Héctor Sandoval en homenaje Jane Vanini

 

Lucy Domínguez, parte de la colectiva Urdiendo Memorias, que ha hecho un fuerte trabajo de visibilización de la violencia político sexual hacia las compañeras detenidas y torturadas en dictadura, también dedicó unas palabras en este homenaje, destacando con ímpetu la importancia de la lucha y el legado de Jane Vanini.

«En el aniversario de la lucha que dió a los marinos nuestra compañera brasilera internacionalista mirista, damos un caluroso saludo a las compañeras de la Jane Vanini, por honrar su lucha su resistencia y compromiso con la libertad, la justicia y una sociedad donde fueran respetados los derechos humanos fundamentales, los derechos sociales políticos de todo el pueblo chileno y latinoamericano, todo nuestro respeto y admiración para ustedes y para la gran Jane Vanini. Un saludo combativo con todas las fuerzas de la historia. ¡Hasta la Victoria siempre!. Lucy Domínguez. Parte de la colectiva Urdiendo Memorias de Concepción.

 

Durante la transmisión radial pudimos conversar con Claudia de la colectiva Jane Vanini, compañeras que llevan un año activando en el territorio de Lorenzo Arenas y que han vuelto a visibilizar la historia la combatiente internacionalista. Las compañeras manifestaron a Radio La Zarzamora: 

«Es importante poder rescatar la vida de la Jane, sacarla del olvido, un olvido que para nosotras no es casual. Jane Vanini fue una mujer muy potente, fue una revolucionaria que se enfrentó en armas a la dictadura, no solamente acá en Chile, sino también a la dictadura en Brasil…¿Quién conoce el caso de Jane Vanini? ¿dónde está Jane Vanini? para nosotras es porque vivimos en una cultura patriarcal. Hay íconos de la izquierda que hicieron exactamente lo mismo de Jane y también íconos del MIR que son muy conocidos, todo el mundo conoce su historia y quienes fueron, y a Jane Vanini no, entonces para nosotras ese sesgo es patriarcado, ese sesgo para nosotras es la invisibilización histórica de las mujeres, la invisibilización histórica de las mujeres rebeldes» Claudia de Colectiva Jane Vanini

Así mismo, durante la jornada se realizó un contacto telefónico en directo desde Brasil con Sandra Silva da Lima, abogada que busca reabrir el caso de Jane. También se contó con la presencia de las poetas Rosy Sáez y Bárbara Saavedra y en la música participaron Aracely Cantora, desde Santiago, La Trinada y la banda de cumbia La Vendeta Feminista, de Concepción.

La Vendeta Feminista en homenaje a Jane Vanini

Este homenaje viene a fortalecer la memoria histórica de las mujeres, haciendo visible la lucha y la capacidad de combate de compañeras que han decidido ocupar la autodefensa colectiva como herramienta para la liberación total. Historias que se ocultan o distorsionan por el orden patriarcal capitalista, para quitarnos nuestra herencia de amor y violencia combativa.Desde ahora y a 47 años de su caída: el 6 de diciembre del ’74 Jane Vanini, jamás volverá a ser borrada de nuestra historia.

Fuente: https://lazarzamoracolectivalesbofem.wordpress.com/2021/12/06/homenajeajanevaninil-ar-2021/


Homenaje a Jane Vanini: «Hoy nacen muchas mujeres como tú en Lorenzo Arenas de Concepción y en América Latina».

 
Por Héctor Sandoval Torres.
 
Hoy 6 de diciembre 2021, se cumplen 47 años de la caída en combate, resistiendo, de Jane Vanini, la compañera brasileña, invisibilizada y menos preciada por sus ex jefes, cuyo cuerpo después de cuatro días de torturas, los asesinos del Ancla 2, la hicieron desaparecer.
 
Ese día, cuando llegaron a su casa los recibió con la metralla de un Aka 47 y retrocedieron. En la retirada llamaron por radio a la Base Naval pidiendo refuerzos y los fusileros y comandos de la Infantería de Marina del Fuerte Borgoño, al mando del teniente Koholer, tomaron posición rodeando todo el perímetro del sector. El camión y otros vehículos en que llegaron los dejaron a la entrada y hacia el frente se aproximan en una camioneta portando un megáfono y potentes focos reflectores de luz, desde donde la conminan a entregarse y su respuesta fue un rafagazo certero a los focos que dejó a oscuras el vehículo y continúo disparando por el frente y por detrás del departamento, porque estaba rodeada. Probaron a qué se rindiera con promesas y nada, seguía disparando, probaron con el propio Pepone que la llamaba a entregarse, pues tenía conciencia de la desigual correlación de fuerzas y nada, ella respondía con disparos mientras ellos con tiros de fusileros y ametralladora casi destruyeron todo el frente del departamento.
 
Había tomado la decisión de quedarse en Chile, cuando la orden del MIR era que todos los extranjeros que se habían integrado al partido, debían salir por el carácter del fascismo y que sea por características fisiológicas o por el acento en el lenguaje, serían fácil presa de la represión, pero ella no se fue y se quedó a luchar con nosotros.
 
Nos relataron los vecinos, que el intercambio de disparos duró más de tres horas hasta que se le acabó el parque.
Antes de iniciar el desigual combate, después del recibimiento en la puerta de su casa, çuando llegaron y tomaron posición, por megáfono llamaron a los vecinos del bloque que desalojaran sus departamentos y los apartaron en una calle aledaña ordenándoles dejar las luces encendidas.
 
Los agentes del Ancla 2 de la Marina habían llegado con José Carrasco engrillado a registrar la casa donde ambos vivian en el segundo piso del bloque. Estaban introduciendo la llave en la cerradura de la puerta cuando escuchan un ruido y retroceden unos pasos hacia la escala, fue ese un acierto, pues detrás del ruido vino la descarga de una ráfaga de su Aka 47. Como el departamento, está en el segundo piso con ventanal frente a la plazoleta, los había visto llegar. La visita retrocedió y la primera reacción, fue que Pepone los había conducido a una trampa. Pero no era así. Jane había viajado a Santiago el día anterior y por lo tanto ella no tenía que estar allí. La compañera Ochi que allá vivía con ellos, nos relató que después de su llegada a Santiago, Jane tras hacer una llamada acordada de chequeo y normalidad, supo que Pepone había caído y decidió regresar esa noche, llegó al día siguiente y permaneció allí. Pepone que la hacía en Santiago, durante la tortura decide para salvar su vida, entregar su casa, cuando el Teniente Kholer le espeto, nos tendiste una trampa, solo atino a decir «pero que hace ella aquí». Era verdad, porque había viajado a Santiago y la compañera Ochi, cuando abrimos la querella para buscar sus restos, nos relató como fue su llegada a Santiago y su regreso Concepción.
 
Jane tomó la decisión consciente de resistir a la dictadura en serio, no se queda en Chile por estar locamente enamorada como alguien escribió por ahí. Su decisión fue consciente. No volvería a escapar de nuevo como cuando tubo que hacerlo en su país, porque los militares habían propinado un Golpe Militar a otro presidente reformista, Joao Goulart.
 
Ella No quiso irse de Chile asilándose, como era la orden de partido por ser extranjera.
 
Ella, la Jane de Cáceres, No quiso quedarse en Santiago cuando supo que Pepone había caído detenido y regresó, porque acá tenía el armamento para combatir y combatió y no se rindió.
 
Ahí radica su grandeza.
 
En eso está impreso el nivel de conciencia revolucionaria. Esa era la compañera internacionalista Jane Vanini de Cáceres del Mato Grosso, la discípula de don Carlos Mariguella.
 
Ella no hizo nada diferente a lo que hicieron otros miristas a quienes con justa razón recordamos y honramos, como Miguel Enríquez, José Bordas o Arturo Villavela, nada distinto al mismo Che Guevara, quién también había tomado la decisión de combatir en un país y por un pueblo que no era el suyo, sin embargo sus ex jefes que viven y viven muy bien, nada han hecho nunca por buscar sus restos, ni buscar justicia, ni menos buscar verdad, pero claro, no era lo mismo para la historia oficial del MIR, ella no era ni hombre, ni jefe militar de nadie para ostentar grados o títulos de guerra inventados, como ellos, los dirigentes, ahora timadores de la memoria, ellos que ahora tiritan cuando los llaman a declarar o huyen, como huyó Aguiló desde los tribunales de Chillan, como una rata cuando lo llamaron a declarar por el compañero Jaime Orellana y Nelson Lagos, dinamitados estando bajo sus órdenes. Esos Jefes vacas sagradas, todavía reverenciados por aduladores genuflexos y obsecuentes. Jefes que nunca hicieron nada por buscar la verdad y justicia para Jane, ni para María Galindo, ni para Jenny Barra o Alicía Ríos o Paulina Aguirre, Araceli Romo, ni para nadie de nuestros camaradas caídos, desaparecidos o dinamitados.
 
Jefes que habiendo sido dirigentes, desertaron de la lucha y abrazaron el neliberalismo. Se hicieron empresarios con los recursos económicos de la resistencia del MIR o se hicieron asesores de la represión contra los que siguieron luchando y hay que decirlo una vez más, se hicieron cómplices de los infiltrados asesinos que nos destruyeron el partido por dentro. Infiltrados que siguen posando de revolucionarios y de miristas, y hasta hablan o escriben firmando como miristas y aparecen presentando libros o documentales y los reciben con aplausos, infiltrados mercenarios que han vivido bien estipendiados por fondos reservados de las Fuerzas Armadas, vivieron como profesionales pagados por el partido y Aguiló y otros como exonerados por las leyes de reparación.
 
La injusticia con Jane era muy triste para nosotros y combatimos la tristeza visibilizando su ejemplo, buscando verdad, investigando hasta los rincones, en Chiguayante encontramos una casa de seguridad dónde se reunían con el Duro Pablo, nos contó la familia, que ella llegaba con su guagua en brazos envuelta en un grueso y colorido charlon, pero la guagua era muy extraña, nunca lloraba. Así salía ella con su Aka envuelta. Y bueno, la verdad la encontramos investigando sus pasos hacia atrás, de a poco, y así dimos con el carpintero que construyó el ataúd en madera en bruto en la Base Naval de Talcahuano y avanzamos gracias al trabajo jurídico y acucioso de nuestro camarada Nelson González y al trabajo de terreno de quienes estuvimos con él hasta su partida y con ello quedó el proceso parado. Tenemos pendiente la justicia del estado, porque a los asesinos logramos descubrirlos y declararon uno por uno, solo falta que el Ministro Especial para los DDHH don Carlos Aldana, dicte sentencia. Nos dijeron que estaba detenido, porque el ADN de Jane no coincide con el de su familia. Eso no es justificación, ya que los malhechores de la Inteligencia Naval y del CIRE, que están individualizados y confeso de haber participado y deben ser condenados en última instancia por secuestro permanente. Reabriremos la querella estamos en contacto con la familia.
 
Compañera Jane Vanini presente ahora siempre.
Los ex pres@s políticos del MIR te honramos.
Nunca estarás olvida, ahora menos que nunca
pues nacen muchas mujeres como tú en Lorenzo Arenas de Concepción y en América Latina.
 
6 de diciembre, 2021.
 
Fuente: https://www.facebook.com/permalink.php
 
 

1 Comment

  1. Conocí muy de cerca la compañera Jane Vanini, trabajaba en Punto final, yo también en tanto colaborador, me encontraba trabajando en Prensa Latina, y también en el periódico del MIR el Rebelde en la clandestinidad el cual fui uno de los fundadores con José Carrasco, Pepone.Ella era una persona de extraordinario carácter siempre estaba al servicio de los otros para informar. Conversábamos a menudo sobre la situación chilena que en ese periodo ya estaba muy delicada la situación producto de la burguesía chilena que poco a poco fue ocupando las calles. Durante la visita de Fidel fui corresponsal del Rebelde, con credenciales entregadas por el Ministerio del Interior.El día del Golpe Jane estaba en la oficina con otros compañeros, se nos aconseja abandonar la oficina, pero no hubo tiempo y todos fuimos a para el regimiento Buin. Con mucha suerte nos dejaron en libertad, entre ellos el Pepone, aparentemente los milicos del buin no sabían que era la revista Punto Final. ¡Todos pasamos a la clandestinidad, fue una de las últimas ocasiones que vi al Pepone y me decía; Bufalo escóndete y guarda los negativos!Después supe que la dina fue a buscar a la compañera donde ella estaba escondida, Jane, no espero vio a los milicos y saco una «carabina garrad» que tenía en su poder y se enfrentó. Esto fue publicado en el periódico El Rebelde en la Clandestinidad en el exterior. Me parece que fue en los años 75 o 76, desgraciadamente no me recuerdo bien la Fecha.Quisiera aprovechar la ocasión para recordar al compañero Mario Mélo, que fue unos de los responsables de la seguridad de nuestro Presidente, Salvador Allende. Mario o el pelao, como le decíamos lo asesinaron cobardemente masacrándolo y lanzando su cuerpo de un helicóptero.Bufalo

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