Entrevista al historiador francés François Schollaert Paz.
“La Guerra del Pacífico fue concebida en Londres”
Es de conocimiento general la frase del escritor británico George Orwell en la que menciona que la historia la escriben los vencedores, generalmente para sepultar y falsear hechos, documentos y biografías, para posicionar un nuevo orden con su respectivo legado, el que nos hacen repetir en las aulas desde niños. Sin embargo, están los historiadores como François Schollaert Paz, quienes no se conforman fácilmente con las “versiones oficiales” y nos entregan una nueva mirada sobre hechos acaecidos en Sudamérica y su relación con Inglaterra.
Por Leo Robles / El Ciudadano.
François nació en un pueblo llamado Poggio-Marinaccio en Córcega (Francia) en el año 1989, a los dos años de edad se traslado con toda su familia a Potosí y posteriormente a Sucre, ciudad donde permanecería hasta finalizar la etapa escolar. Licenciado en historia en la Universidad de Westminster en Londres, estudió un año en La Sorbona, para luego desempeñarse como Segundo Secretario del Ministerio de Relaciones Exteriores de Bolivia. Actualmente se encuentra de vuelta en Inglaterra, desempeñando las funciones de Adjunto Civil de la Embajada altiplánica ante el Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte.
¿Cómo comenzó tu interés por la historia de Sudamérica?
Mi padre fue una gran influencia en mi interés por la historia en general. Él investigó mucho la historia de Bolivia en el contexto internacional. Sin embargo, empecé a interesarme seriamente cuando llegué a Inglaterra a mis 19 años.
Durante mis estudios en Londres participé de las conferencias en Canning House, un centro de conferencias para temas relacionados a Latinoamérica en el ámbito político, histórico, cultural y comercial. Me llamó mucho la atención cuando vi que en la plaza donde se encuentra Canning House (en pleno centro de Londres) se levantó una estatua de Simón Bolívar. Fue en ese momento que me pregunté: ¿por qué Inglaterra un país con una extensa historia tendría una estatua del héroe latinoamericano en el corazón de su capital? Es así que comencé a informarme sobre la relación histórica británico-sudamericana. Como trabajo final en la Universidad, escribí una tesis sobre la influencia del Imperio Británico en la Independencia de Bolivia.
¿Tuvieron mucho que ver las logias masónicas?
Hoy en día hablar de logias masónicas es considerado hablar de “conspiración”, así que prefiero evitar hablar al respecto, pero es un hecho que las logias estuvieron presentes en las tomas de decisiones para la creación de las Nuevas Repúblicas de América. El ejemplo más común es el de Simón Bolívar. Bolívar era un empresario, dueño del cacao en la zona que hoy se conoce como Venezuela y Colombia. Los Bolívar enfrentaron muchas trabas de parte del Imperio Español en la exportación de su cacao. España impuso el monopolio del cacao y no permitía a los Bolívar negociar con otros países. Con el avance del Imperio comercial británico a inicios del siglo XIX, Los mercantes ingleses le propusieron a Bolívar el “Free trade” o libre comercio. Es ahí cuando Bolívar crea lazos estrechos con Inglaterra y hacen un intercambio: la Independencia para el continente Latinoamericano y el comercio del mismo para Inglaterra. Con este contacto, Bolívar viaja a Londres donde es introducido a las Logias Masónicas. La Independencia de América es un plan que nace en Londres, al igual que la Guerra del Pacífico. Simón Bolívar vuelve a Latinoamérica con el Apoyo de Inglaterra y es ahí cuando se inician las fuertes relaciones entre el Imperio Británico y las nuevas Repúblicas Americanas. Una de las logias a las que Bolívar perteneció fue la Logia Lautarina o Logia de los Caballeros Racionales fundada en Londres en 1797. Si una persona puede llegar a creer que Inglaterra estuvo muy presente en las Guerras Independentistas de Sudamérica, podrá entender con más facilidad la razón por la cual los ingleses estuvieron también presentes en la Guerra del Pacífico.
¿Qué pasó con Chile?
En Chile la influencia británica es más fuerte por el hecho de que está ubicado en las costas y que en el siglo 19 tenía una población relativamente pequeña si comparamos con los demás países de la región. Además, Chile tenía menos cercanía con el Imperio Español, ya que este último tenía más presencia al interior del continente, es el caso de la ciudad de Sucre o la Ciudad de México. Bolivia por su posición alejada de los mares, estaba más alejada de la influencia británica. Si vemos como se organiza el Imperio español, es un imperio que pone el poder al centro, como es el caso de su capital Madrid, mientras que Inglaterra busca más las regiones conectadas al mar, o costeras como Chile. Antes de la independencia sudamericana, los centros vitales estaban ubicados más al centro del continente, pero después de la independencia, con la influencia británica, las capitales se van a las costas: Santiago y Valparaíso, Lima y Callao, Buenos Aires, Montevideo y Río de Janeiro entre otras ciudades son ejemplos. Bolivia es un caso diferente, sin embargo, La Paz le quitó la capital a Sucre, porque Sucre no tenía movimiento económico y La Paz estaba más cerca al mar, o sea al comercio. Tengo la impresión de que La Paz es la capital porque está mucho más ligada a las costas del Pacífico. Inglaterra controló los mares por los últimos 200 años.
Tengo en mi poder un artículo de un periódico británico de los años en los que se desató la Guerra del Pacífico, en el cual se puede apreciar el interés que tenían por las costas. En el artículo atacan muy fuerte a Bolivia diciendo que “es un países semi-bárbaro que no conoce la civilización” – y agregando que – “a Inglaterra no le interesa mucho esta nación, pero sí el Pacífico, donde existen dos países como Chile y Perú que están bajo la influencia británica y lo saben, porque no pueden hacer mucho contra la flota inglesa”, debido a su vulnerabilidad a los barcos.
¿Estás diciendo que el poderío marítimo inglés ha configurado geopolíticamente la distribución de los países y de las capitales en América del Sur?
Definitivamente. Fue muy similar a la división de los países Africanos en el siglo XX. El mejor ejemplo es la República de Gambia, este país fue una colonia disputada entre franceses e ingleses, pero terminó bajo poder inglés debido al Rio Gambia donde se encontraban los barcos ingleses. Los límites fronterizos de la República de Gambia, se dice que eran la distancia hasta donde alcanzaban los cañones de los barcos ingleses, más a allá de los cañones era la colonia francesa, lo que hoy se conoce como Senegal.
A veces me pregunto por qué Chile y Bolivia no fueron anexados como parte de Argentina o como parte de Perú en la Independencia. Esto corresponde a que Inglaterra hizo lo mismo que en muchos continentes, vale decir, crear países “innecesarios” como Estados Tapones para debilitar ciertas regiones o pueblos. Simón Bolívar tenía la intención de crear los Estados Unidos de Sudamérica o lo que él llamó la Gran Colombia, pero este proyecto no se llevó a cabo, quizás por la influencia de Inglaterra.
¿Afirmas entonces que los ingleses pusieron a Simón Bolívar como su hombre fuerte en el sur del continente americano?
Así lo creo. Con Estados Unidos, Inglaterra claramente vio un error de colonización, porque no debieron haber dejado para sus intereses que se unificara, debido a que la unión hace la fuerza. En cambio en Sudamérica dijeron: “vamos a dividir a los países con una táctica que viene del Imperio Romano”. De hecho, en Inglaterra se afirma muy a menudo que el Imperio Británico es de origen Romano, fue el Imperio Romano que se trasladó a Londinium o Londres como se conoce hoy en día.
¿Cómo llevó a cabo sus planes Inglaterra?
Antes de las ideas revolucionarias de Francisco de Miranda y la Independencia Americana, en Inglaterra existía el Plan Maitland, un plan propuesto por un británico, el cual tenía como objetivo “liberar” a las Américas de los españoles e instalarse ahí. El Plan Maitland hablaba de entrar al continente hispanoamericano con barcos por el río de La Plata, tomar Buenos Aires, pasarse por detrás de la cordillera, tomar Santiago y a partir de ahí expandir su influencia al resto del continente. Dicen que el movimiento independentista de San Martín y el Plan Maitland son un espejo, vale decir, son lo mismo.
Todos los caudillos como San Martín y O´Higgins estuvieron en Inglaterra y fueron adoctrinados por Miranda, lo que no es casualidad.
Entre los sudamericanos hay gente de origen vasco y continental en su mayoría, pero se dice que muchos discriminaban a Francisco de Miranda por su origen canario, proveniente de las islas africanas de España. Bolívar y San Martín se dice que no lo querían. Es más, puede que sólo lo hayan utilizado, teoría que igual podría aplicarse a Bolívar, de que se dice que ha muerto pobre. Pero el Plan Maitland es un punto clave. El escritor boliviano René Zavaleta Mercado dijo que Chile es un satélite privilegiado del Imperio Británico, como base militar británica, porque no hay razón de que Chile como país sudamericano no permita a Bolivia tener acceso al mar. Chile es el sexto país con más costa en el mundo, darle un pequeño pedazo de tierra a Bolivia no le afectaría en nada. Si me preguntan a mí cuándo Chile devolvería el mar, les respondería que cuando se termine la minería en la región en disputa, el Desierto de Atacama.
¿Cuál fue el rol de la familia Edwards en la Guerra del Pacífico?
Hay dos teorías, la de un pirata que llega y se casa con una mujer chilena prominente de origen español, tras lo cual crea su imperio poco a poco. La otra teoría es que es un doctor o incluso alguien de origen más humilde con un oficio cualquiera. En todo caso nunca llegaba gente de la monarquía británica, sino que quienes buscaban forjarse un mejor futuro. Lo que me llama la atención es que Edwards compra el periódico El Mercurio de Valparaíso cuatro años antes de la Guerra del Pacífico. Es muy importante controlar los medios de comunicación en el arte de la guerra. Hay un fragmento del periódico el Mercurio en los archivos de la Casa Gibbs en Londres, que dice: “Espíritus ligeros han creído ver en la compañía la causa eficiente de esta guerra, pero no fijan la atención que la causa verdadera de esta guerra es un conflicto internacional iniciado entre dos naciones”. Toda esa información fue tergiversada, si le das la vuelta a las afirmaciones del Mercurio, te acercas a la verdad. Lo que quieren es decirte algo así como que el tonto es el que cree que la compañía ha causado la guerra, mientras que el inteligente sabe que es una guerra entre Perú-Bolivia y Chile. Fue con este tipo de información que la verdad sobre esa guerra fue volviéndose más misteriosa.
Además hay muchos documentos que prueban que el Banco Edwards es una subsidiaria del Banco de Inglaterra. La diferencia de Chile con muchos otros países sudamericanos es que los primeros bancos de Bolivia, Brasil, México y Perú, siempre eran bancos con nombres como “Banco de Bolivia y Londres”, “Banco de Lima y Londres”, “Banco de México y Londres”, mientras que en Chile el banco simplemente se llamaba Banco Edwards, algo que era obviamente un banco de gente ligada a Inglaterra. Para la Guerra del Pacífico el Banco Edwards y el Banco Central de Chile que estaba dirigido en ese tiempo por un señor inglés que no recuerdo muy bien su nombre. Entonces, todos los bancos de Sudamérica estaban en poder de los ingleses. Otra cosa que coincide con los intereses de la familia Edwards, es que el Banco Nacional de Bolivia es fundado el mismo año en que estalló la Guerra del Pacífico, y entre los fundadores figura Edwards, y uno debe preguntarse ¿cómo es que un chileno va a fundar el banco boliviano en ese momento específico? Los que fundan el banco son los chilenos Edwards, Concha y Toro, junto a otros bolivianos.
¿Qué rol jugaron los Ross?
Hay algo que me llama mucho la atención sobre esa familia, a pesar de que no encontré mucha información al respecto. La persona que supuestamente habría asesinado al Presidente Hilarión Daza se apellidaba Ross. Para mí, uno de los verdaderos héroes de la Guerra del Pacífico era justamente el Presidente boliviano Hilarión Daza, a quién la oligarquía boliviana lo hizo escapar vergonzosamente, lo humilló cuando trato de regresar a Bolivia después de 15 años en el exilio en Paris. Según algunos historiadores bolivianos, un borracho le disparó a Daza en Uyuni, justamente en la Avenida Arce, paralela a la Avenida Simón Bolívar, paralela a la Avenida Abaroa, y bueno… este borracho resultó ser de apellido Ross. En Bolivia no hay apellidos británicos por todas partes, por eso es mucha coincidencia que un Ross lo haya matado, al que no le hicieron ningún juicio porque era un borracho.
Hablemos más de la figura de Hilarión Daza
Es increíble ver los manuscritos de esa guerra. Por ejemplo las cartas del representante de la Compañía de Salitres y Ferrocarril de Antofagasta, el señor George Hicks, este señor no estaba muy contento con los bolivianos en las costas, siempre fue muy despectivo con los bolivianos, por ejemplo hay una carta que dice “los bolivianos se están creyendo muy gallitos, pero con esta acción se darán cuenta que no pueden molestar a un súbdito de la reina, y con esto también los chilenos se darán cuenta de que les conviene tener a los ingleses de su lado”. Hicks también declaró que: “se espera que Chile utilice esta oportunidad (el impuesto de los 10 centavos que erróneamente sacó Daza) para adueñarse de esta costa que está plagada de bolivianos”, como si los bolivianos fuesen una plaga.
Días después, el 1 de febrero de 1879, un mes antes de la Guerra, Daza escribió a la autoridad de Bolivia en Antofagasta diciendo: “He fregado a los gringos”, porque en ese tiempo los gringos no eran los yankees, sino los ingleses, tengo muchos documentos que comprueban eso. Daza se refería al impuesto de los 10 centavos como una forma de reivindicar las salitreras. Quizás Daza sabía lo que iba a pasar, no estoy seguro. Pero yo veo esto como un conflicto entre empresas, aunque mucha gente lo ve como una pobre guerra entre Chile y Perú- Bolivia. Es una guerra entre transnacionales en Sudamérica.
Las empresas ya desde entonces estaban sobre los países
Lo complicado aquí es darse cuenta de eso al estudiar la Guerra del Pacífico, porque muchas empresas son británicas, pero también está la empresa francesa Dreyfus que en práctica era casi dueña del Perú, o es lo que afirman algunos historiadores. Dreyfus incluso propuso pagar al Perú toda su deuda externa. También estaba la Casa Grace, la compañía que vendió armas a Chile y a Perú durante la guerra de 1879, hicieron mucha fortuna en este último país, de hecho el dueño de la Casa Grace, William Russel Grace fue apodado como rey del Perú, y este señor viene y se hace fortuna con sus barcos también, llevando mercadería, guano, madera, azúcar, y muchas cosas más.
El centro del poder en Bolivia está en la calle Yanacocha y Mercado. En esa esquina está el Banco Central, la Vicepresidencia, la Iglesia y el banco de Simón Patiño que ahora se llama Banco Mercantil Santa Cruz. Esa esquina es muy poderosa, y es la misma esquina donde estaba ubicada la Casa Grace, la misma casa que sobrepasó a Dreyfuss y Gibbs en Sudamérica.
¿Cuál es el rol de John Thomas North en la Guerra?
La historia dice que llegó a Chile con muy poco dinero, con tres libras esterlinas en los bolsillos, como ingeniero de las máquinas de las salitreras y que después se fue metiendo en el negocio. El momento cuando prospera es cuando Inglaterra le propone a Bolivia fundar Tarapacá Waters, una compañía para manejar el aprovisionamiento de agua para la región de Atacama que en ese entonces era boliviana. Así de este modo, los ingleses le venden esta compañía a Bolivia unos dos años antes de la guerra, sabiendo que de eso se iba a adueñar Chile. Entonces durante la Guerra, Chile entra en Tarapacá, toma la empresa de agua y nombra como presidente de ésta a John Thomas North. Luego, este hombre, cuando Chile invade Perú, aprovechando que todos los peruanos querían escapar, viaja a Perú y compró las salitreras a “precio de gallina muerta”. Termina la guerra y las salitreras suben de precio nuevamente. Él se hace millonario y además las salitreras están aprovisionadas de agua por la compañía de la cual el mismo era presidente. De acuerdo a muchos historiadores, el que más ganó en la guerra del Pacífico fue John Thomas North, yo he visto su casa en Inglaterra que ahora es la biblioteca de la Universidad de Greenwich. Al ingreso de esta biblioteca hay una puerta de una iglesia del Perú que los chilenos habían saqueado para los ingleses. Esa mansión había sido antes de otra persona pero él la compró y la refaccionó con madera sudamericana. Y bueno, después de la Guerra fue uno de los hombres más con más importantes negocios en Inglaterra, tanto así que era un hombre fuerte en la Bolsa de Valores de la City de Londres. Fundó una empresa de cemento en Bélgica, varias empresas en Francia, otras de exploración de oro en Australia, de diamantes en el Congo y abre centros de caridad en Inglaterra entre otras cosas que no recuerdo en este momento.
¿Quién fue el responsable de que los bolivianos aumentaran los 10 centavos que iniciaron la Guerra?
Es un ministro, un asesor del Presidente Daza quien lo propone. No había influencia inglesa directa en esta decisión. La única es de los bolivianos chileno filos que estaban apoyando a Chile, que a su vez apoyaban a Inglaterra. Pienso que no hubiera habido conflicto si Bolivia hubiese sido como Chile, un país en muy buenas relaciones con Inglaterra. Bolivia no tiene muchos contactos con Inglaterra, son reiteradas las veces en las que las autoridades inglesas son botadas por las bolivianas. Empieza con el Tata Belzú. Belzú bota a los ingleses, rompe las relaciones bilaterales con Inglaterra. Luego viene el presidente Morales que también tuvo algunos roces con Inglaterra, luego Melgarejo con la anécdota que más se cuenta en relaciones internacionales boliviano-británicas. Se dice que Melgarejo le ofreció chicha al diplomático inglés residente en Bolivia y que éste le respondió que no tomaba chicha, pero que le gustaría tomar chocolate. Entonces Melgarejo le hizo beber un balde entero de chocolate, le quitó la ropa y lo amarró a un burro para que lo llevara a la costa y lo despachara a Londres. Esta historia la cuentan los ingleses y los bolivianos pero no hay pruebas al respecto.
Se rumorea que Eduardo Abaroa, el héroe nacional de Bolivia, no es boliviano, sino chileno. ¿Qué hay de verdad en ello?
No hay pruebas contundentes, solo especulación. Hay que cuestionarse por qué Abaroa es tan bien visto por los historiadores chilenos, mientras que Hilarión Daza, a mí parecer el héroe boliviano, es mostrado por Benjamín Vicuña Mackenna (historiador chileno) como un dictador que se dio a la fuga, como un monstruo, el más grande traidor de Bolivia. Mientras que Vicuña Mackenna describe a Abaroa como un hombre de buena estatura, rubio, de ojos azules, bien parado, hombre de buena fe. ¿Qué gana Vicuña Mackenna al desprestigiar a Daza y al hablar bien de Abaroa? Al final de cuentas son personajes de la historia boliviana, no chilena. Además Vicuña Mackenna es conocido por ser un ferviente nacionalista, es raro que hable bien del héroe boliviano, cuando lo lógico sería que lo detestara, ¿no?
En esa época si tú lees los periódicos británicos sobre el conflicto entre bolivianos y chilenos no tiene nada que ver con los ingleses en cuanto a la clase mestiza y criolla. Sino que se fomenta la guerra al decir que los chilenos eran vascos y los bolivianos del sur de España, por lo cual se decía que los chilenos eran más trabajadores por el hecho de venir de una región del norte de la península, más fría, más pobre, donde la gente debe ser más laboriosa. Por lo mismo llegan más pobres a Chile y deben esforzarse más, mientras que los españoles que llegan a Bolivia se dice que son más “flojitos”. Entonces tenemos que Abaroa es de origen vasco y que si bien está en una región que era boliviana en ese tiempo, él estaba ubicado más cerca de los centros vitales chilenos que de los bolivianos. Además, en esa época no se definían muy bien las fronteras, de dónde eran las personas. Y además Abaroa nunca fue ayudado por Bolivia, si alguien lo ayudó de alguna forma en sus negocios fueron los comerciantes, los mercaderes del mar, él tal vez tenía mejor relación con la gente que navegaba que con la gente del altiplano. Si uno revisa sus cartas, va a darse cuenta que Abaroa tenía más relación con los extranjeros de la costa que con los mismos bolivianos. O sea, Abaroa no tiene por qué defender a Bolivia. Otra cosa es que lo matan los chilenos y los chilenos lo entierran rindiéndole honores, lo cual no es lógico. El otro tema es que un hombre adinerado o de la aristocracia no va a la guerra, a la guerra van la gente de clases bajas, o en ese entonces los indígenas, los rotos, la gente pobre.
¿Dices que probablemente Simón Bolívar nunca fue a la guerra?
Un historiador inglés experto en Bolívar, Matthew Brown, describe a Bolívar como un hombre de baja estatura, muy delgado, con problemas de espalda. Entonces Brown pregunta ¿Cómo puede bajar en caballo desde Colombia hasta Bolivia? Es algo muy dudoso. Entonces simplemente se crean héroes de gente que posiblemente estuvo sentada todo el tiempo.
¿Qué te parece que el Gobierno boliviano culpe enteramente a Chile de la Guerra del Pacífico?
Es una pena porque Chile igual ha salido perdiendo de la guerra. Enrique Amayo, un historiador peruano cuestiona si la guerra fue una victoria para Chile o para la reina Victoria. Por ejemplo, vemos después la Guerra Civil en Chile entre el presidente Balmaceda y John Thomas North. Balmaceda es el Daza chileno. Daza quería nacionalizar el salitre para los bolivianos y Balmaceda para los chilenos. Lo que hace este último es bajar los precios de los terrenos de la región de Atacama y concede préstamos a los empresarios chilenos para que los compren, así, de este modo los ingleses no pueden explotar esos suelos porque ya son propiedad privada. Entonces Balmaceda va a esos lugares y comienza su revolución. Entonces Thomas North hace una fiesta para la oligarquía chilena de 10 mil libras con regalos, poniéndolos en contra de Balmaceda. Se reúnen tres veces Balmaceda y North. Finalmente Balmaceda se suicida.
mayo 5, 2015.
“La Guerra del Pacífico fue concebida en Londres” (Segunda parte)
Es de conocimiento general la frase del escritor británico George Orwell en la que menciona que la historia la escriben los vencedores, generalmente para sepultar y falsear hechos, documentos y biografías, para posicionar un nuevo orden con su respectivo legado, el mismo que nos hacen repetir en las aulas desde niños. Sin embargo, están los historiadores como François Schollaert Paz, quienes no se conforman fácilmente con las “versiones oficiales” y nos entregan una nueva mirada sobre hechos acaecidos en Sudamérica y su relación con Inglaterra.
Por Leo Robles Belmar, El Ciudadano.
¿Qué te parece que el Gobierno boliviano culpe enteramente a Chile en la Guerra del Pacífico?
Es una pena porque Chile igual ha salido perdiendo de la guerra. Enrique Amayo, un historiador peruano, cuestiona si la guerra fue una victoria para Chile o para la Reina Victoria. Por ejemplo, vemos después la Guerra Civil en Chile entre el presidente Balmaceda y John Thomas North. Balmaceda es el Daza chileno. Daza quería nacionalizar el salitre para los bolivianos y Balmaceda para los chilenos. Lo que hace este último es bajar los precios de los terrenos de la región de Atacama y concede préstamos a los empresarios chilenos para que los compren, así, de este modo los ingleses no pueden explotar esos suelos porque ya son propiedad privada. Entonces Balmaceda va a esos lugares y comienza su revolución. Entonces Thomas North hace una fiesta para la oligarquía chilena de 10 mil libras con regalos, poniéndolos en contra de Balmaceda. Se reúnen tres veces Balmaceda y North. Finalmente Balmaceda se suicida.
Me parece que Bolivia no debería culpar enteramente a Chile en la Guerra del Pacífico, pero también pienso que Chile debería reconocer el impacto de la influencia británica sobre su país. Chile podría reconocer que era un país muy endeudado por Inglaterra y que sólo le quedaba responder a los intereses ingleses en Atacama. El Gobierno chileno fue presionado por la Compañía de Salitres y Ferrocarril de Antofagasta a invadir Bolivia, esa compañía era manejada desde Londres por Antony Gibbs & Sons. Además, la cabeza de la empresa Antony Gibbs & Sons estaba dirigida en 1879 por Henry Huck Gibbs que a su vez era Presidente del Banco de Inglaterra y Representante de la City de Londres ante el Parlamento británico. La Empresa Antony Gibbs estaba financiando la Guerra del Pacífico.
Volviendo al tema sobre Balmaceda, es indispensable que al hablar de la Guerra del Pacífico se incluya la Guerra Civil Chilena y el “suicidio” de Balmaceda provocado por North y los empresarios ingleses de Atacama, sólo así se puede entender que Inglaterra ganó todo, venciendo a Bolivia y Perú y más tarde a Chile. El periódico inglés The Times en un artículo sobre la Guerra Civil chilena dijo:
“sin citar los nombres, algunos de los que son muy bien conocidos en el London Stock Exchange, apuntados claramente instigadores, enchufistas, financieros de la llamada Revolución [Guerra Civil Chilena], eran y son los ingleses o anglo-chilenos dueños de los grandes depósitos de salitre en Tarapacá”.
Guardando las proporciones, suena similar a lo ocurrido con Salvador Allende: por un lado los Edwards desestabilizando el país y después un suicidio que muchos hablan que podría haber sido asesinato.
Es lo mismo que el caso de Hilarión Daza, en los colegios bolivianos enseñan que: “la muchedumbre enardecida lo mató”. Cada niño que estudia en Bolivia debe recordar para el día del examen que Hilarión Daza fue asesinado por una muchedumbre enardecida, por su propio pueblo, por una supuesta traición a la patria. Cuando hablaba con mis abuelos o con mi madre sobre Daza, les daba un escalofrío y se enfurecían porque lo recordaban como el traidor más grande del país. Aquí en Bolivia ni siquiera hay una calle con su nombre.
Y en realidad, lo que pasó es que Daza fue presionado por la oligarquía boliviana, y tuvo que exiliarse en 1879 dejando a Bolivia en medio de una guerra. En 1894, Desde su exilio en Paris, Daza solicitó al Gobierno boliviano se le permita ingresar al país para explicar quién realmente tuvo la culpa en la guerra. Daza regresa a Sudamérica, desembarca en Antofagasta, toma el tren hacia Potosí y llega al pueblo de Uyuni, donde el Gobierno había preparado todo para que Daza no pueda llegar a su destino final y declarar sobre los verdaderos traidores de la guerra, ya que esto podía debiliar a la gente en el poder. Daza fue asesinado silenciosamente de noche en la Avenida Aniceto Arce, paralela a la Avenida Simón Bolívar y a la Avenida Eduardo Abaroa. Esta versión de la historia la comparte el historiador Roberto Querejazu Calvo, uno de los historiadores más reconocidos sobre el tema de la Guerra del Pacífico. Hago un paréntesis para mencionar que Querejazu Calvo fue Embajador de Bolivia en Londres, oportunidad donde pudo conocer la implicación británica en esta guerra. El historiador Edgar Oblitas escribió un pequeño texto titulado ¿Quién mató al ex – Presidente Hilarión Daza?
Volviendo a Eduardo Abaroa ¿Cuál es el la relación de la familia Luksic con Eduardo Abaroa?
El magnate chileno Andrónico Luksic Abaroa era nieto de Eduardo Abaroa. ¿Quién diría que uno de los empresarios mineros más importantes de Chile iba a ser el descendiente del héroe de Bolivia en la defensa de Atacama? ¡es irónico!
En Bolivia también existe la familia Abaroa, descendiente de Eduardo Abaroa. El miembro más conocido es Ronald MacLean Abaroa que fue Canciller de la República de Bolivia, también fue Alcalde de la ciudad de La Paz, es un boliviano muy destacado. Personalmente no lo conozco pero me dijeron que tiene mucho interés por la historia de su familia. MacLean publicó las cartas de Eduardo Abaroa bajo el título de Cartas de Abaroa. Ahí, MacLean habla de la relación de su familia con los Luksic Abaroa, y asegura que la familia Abaroa es de las más importantes en el desierto de Atacama, por sus negocios mineros. En su publicación también cuenta que cuando él era Alcalde, la familia Luksic mandó un tren hasta Bolivia para que MacLean realizara una visita oficial a la zona minera de Atacama.
Según el periódico La Razón de Bolivia en un artículo publicado este año para el Día del Mar [23 de marzo], el soldado que habría asesinado a Eduardo Abaroa era el hijo del británico Robert Souper Howard.
¿Te sientes anti-inglés?
No, para nada. Me encanta Inglaterra, su gente, su moda, la ropa, la música, la cultura en general, sus universidades, su inmenso aporte al mundo, sus deportes, y sobre todo su historia. Estoy muy contento de regresar a Londres dentro de poco tiempo.
No se puede decir que Inglaterra tuvo toda la culpa por el conflicto, eso estaría mal. Simplemente me parece que debería ser de conocimiento general que Inglaterra tuvo tanta culpa en la Guerra del Pacífico como la tuvo Bolivia, Chile y Perú. Sólo así se puede entender por qué ocurrió este desastroso conflicto. No soy ni anti-inglés, ni anti-chileno, ni tampoco anti-boliviano o peruano, lo que me interesa es que se cuente la historia sin olvidar estos aspectos, y vuelvo a repetir, aspectos que son ignorados por una inmensa mayoría por lo menos en Bolivia, y cuando digo inmensa incluyo a la clase más educada.
También debemos reconocer que los ingleses que migraron a Atacama fueron gente con mucho valor. Atacama es un desierto y poco tiempo antes de 1879 hubo un terremoto en esa región. ¿Quién hubiera querido vivir en un lugar así? En ese sentido me parece que los ingleses de Atacama se llevan mucho crédito, no cabe duda que han aportado al desarrollo de Chile, Perú y Bolivia. Muchos historiadores ingleses dirían que al fin y al cabo Inglaterra trajo ferrocarriles a Sudamérica, y muchos otros beneficios que aportaron al continente. La familia Gibbs invirtió mucho dinero en la construcción de ferrocarriles al igual que John Thomas North y otros empresarios británicos. En todo este periodo de la explotación de guano, salitre y minerales, muchos británicos vinieron a trabajar en condiciones que muy poca gente hubiera deseado hacerlo. Es importante verlo también desde ese punto de vista y valorar el gran aporte británico a Sudamerica.
Ahora bien, provocar una guerra no está bien visto en ninguna parte del mundo. Esa guerra que supuestamente fue por “cuestiones limítrofes” no hubiera sucedido si Inglaterra no tenía interés de apropiarse de los recursos naturales de Atacama y Tarapacá, y de vender armas a Chile y a Perú. Eso es lo que debe aclararse, Inglaterra tuvo mucho que ver en esa guerra. A traves de periódicos y otros medios se ha encubierto a Inglaterra en este conflicto, y mucha gente, tanto en Inglaterra como en Bolivia, ignora estos hechos.
¿Cuántas armas envió Inglaterra a Chile? ¿Las suficientes para romper el equilibrio en una guerra?
Claro, Bolivia no tenía nada, estaba desarmada. El único equilibrio hubiera sido que Chile no reciba ningún arma de Inglaterra, y ahí, la guerra hubiera sido más equilibrada, pero te puedo asegurar que hubiera sido una guerra peleada con palos y piedras. En el Archivo Nacional de Inglaterra en Londres hay una carta fechada el 23 de Abril de 1879, la misma que fue enviada por el Cónsul de Bolivia en Londres a las autoridades británicas solicitando suspender el envió de armas a Valparaíso. Inglaterra no se tomo la molestia de responder a esa nota. La Casa Grace del británico William Russel Grace que estaba acrecentando su fortuna iniciada en Perú, se dedicó a vender armas a Chile y a Perú simultáneamente. Bolivia hasta donde tengo conocimiento no accedió a la compra de armamento inglés, tal vez por la escasa relación entre ambos países. El ejército chileno estaba muy bien armado, por eso la ocupación de Antofagasta fue fácil. Chile y Perú estaban bien armados, pero bien endeudados con Inglaterra también. 32 millones de libras esterlinas es lo que queda debiendo Perú después de la Guerra del Pacífico, una cantidad impresionante para la época, y Chile le seguía de cerca.
Inglaterra no fue neutral en ningún momento, siempre apoyó a Chile con las armas, con la logística, con los periódicos, con los barcos, y por supuesto con el financiamiento. En 1879 Bolivia no tenía como defenderse en el mar, y lo que hizo el Gobierno de Bolivia fue emitir un decreto para otorgar patentes de corso a los barcos de las naciones amigas que navegaran por la costa boliviana, a fin de poder apoyar a Bolivia. Al respecto, el 15 de agosto de 1879, la Cancillería británica envió un circular a los Almirantes de la Marina británica en el Pacífico instruyendo no reconocer el decreto boliviano. Mientras tanto, los británicos no sólo estaban vendiendo armas y barcos a Chile, también estaban dirigiendo esos barcos y organizano a sus ejercitos. Una guerra de Inglaterra contra Bolivia y Perú, y más tarde contra Chile.
¿Cómo era el comportamiento de la prensa en 1879?
Esa era el arma más fuerte que utilizó Inglaterra. Tengo varios artículos de la época de 1879 de periódicos británicos donde informan que Chile era un país muy civilizado que se enfrentaba a dos naciones semi-barbaras: Bolivia y Perú. Incluso hacían pronósticos de la guerra diciendo que Chile saldría victorioso, y terminaban diciendo que: “el bien está del lado de Chile, una pequeña nación civilizada”. Estos artículos son de periódicos británicos reconocidos como The Times o The Pall Mall Gazette. Otro artículo muy interesante decía que: “Bolivia está fuera del alcance británico pero Chile y Perú, dos países extendidos a lo largo de la costa, están a merced de la flota británica, y lo saben.”
En Chile el periódico El Mercurio era manipulado por Gibbs y Edwards para confundir a la población sobre las causas de la guerra, y hacer creer que el problema del Pacífico era sólo entre Bolivia y Chile, en lugar de explicar que Chile estaba presionado a invadir Bolivia por intereses británicos. Otro periódico chileno de la época era El Ferrocarril, que hasta donde sé era controlado por los empresarios del Ferrocarril, o sea los británicos, ese periódico atacaba muy fuerte a Balmaceda en la Guerra Civil, apoyando indirectamente a John Thomas North.
Del lado boliviano el periódico más importante en 1879 era El Comercio. Uno de sus columnistas era José Lucero quién denunciaba a la Compañía de Salitres y Ferrocarril de Antofagasta por causar esta guerra. Después del año 1879 Lucero no volvió a publicar más artículos y los periódicos bolivianos empezaron a difundir mentiras igual que El Mercurio. Encontré en un libro sobre gente ilustre de la ciudad de La Paz que este señor José Lucero era un intelectual muy reconocido de la época. Bolivia al igual que Chile tenía sus periódicos manipulados para encubrir a Inglaterra. Después de 1879 Inglaterra ya no figuraba en practicamente ningún artículo sobre la Guerra del Pacífico, se empezó a perpetuar la idea de que en la guerra sólo participaban Chile, Bolivia y Perú, nada más. Y sigue así hasta el día de hoy. Es impresionante como se puede ocultar o borrar la historia.
La influencia inglesa en Chile es descarada
En un periódico inglés de la época se publicó un artículo de un viajero norteamericano que pasaba por Valparaíso a finales del siglo XIX, quien dijo que: “Valparaíso por su comercio controlado por los ingleses, sus transacciones en libras esterlinas, su periódico The Chilean Times y su exclusivo uso del idioma inglés, no es nada más que una colonia inglesa.”
En Chile hay varios lugares con nombres británicos. Al sur de Chile existe un mar llamado Mar de Escocia. Si mal no recuerdo también exista una ciudad o pueblo llamado Cochrane. El héroe de la Independencia de Chile se llama O’Higgins, el héroe en la Guerra contra la Confederación Perú-Bolivia era el inglés Robert Winthrop Simpson. En la Guerra del Pacífico, se pueden encontrar nombres ingleses dentro de la armada chilena como Condell, Cox, Christie, Edwards, Leighton, Lynch, Macpherson, Pratt, Rogers, Simpson, Smith, Souper, Stephens, Thomson, Walker, Warner, Williams, Wilson y Wood. El ascensor Reina Victoria de Valparaíso lleva a la calle Atkison Street, corazón del antiguo barrio británico. Tengo varios textos de viajeros franceses e ingleses que viajan a Chile en el siglo XIX y es impresionante cuando hablan de la influencia británica en Chile. El marinero francés Auguste Marie Gicquel des Touches que llegó a ser Jefe de la Marina Francesa, en uno de sus viajes por la costa del Pacífico en 1825 dijo: “Los ingleses son numerosos por todas partes, tanto en el Perú como en Chile. Estoy seguro que en Valparaíso no hay menos de 150 familias, número que aumenta todos los días. En mi idea, veo desde aquí a la América del sur oriental como occidental conquistada por los ingleses, ellos serán lo que fueron los españoles, los dueños absolutos, se llevarán todas las riquezas del país, solo habrá una diferencia, estos lo harán cubiertos de un velo de moderación”. Este documento está en los Archivos Diplomáticos de Francia en la Courneuve, Paris.
¿Y la influencia inglesa en Bolivia?
La influencia inglesa en Bolivia no fue muy fuerte justamente por que como dije anteriormente, los centros vitales de Bolivia estaban lejos del mar, por consiguiente lejos de Inglaterra. La influencia británica en Bolivia se da más en la Independencia. Cuando Bolivia nace a la Independencia, el Ministro de Guerra del país, el Alcalde de la ciudad de Potosí, el Alcalde de la ciudad de Tarija, y el Director para las Minas de Potosí, todos ellos eran británicos. El primer Canciller de Bolivia era un español que llegó a Bolivia escoltado por soldados británicos. La influencia británica fue más debil en Bolivia.
Para la Guerra del Pacífico, algo muy interesante es el caso de Pedro José Domingo de Guerra y Sánchez de Bustamante. Este señor fue Presidente de Bolivia inmediatamente después de Hilarión Daza, o sea durante la Guerra del Pacífico. Lo curioso sobre el Presidente Domingo de Guerra es que a finales de la década de 1830 e inicios de 1840 fue Ministro Plenipotenciario de Bolivia ante la Corte de Saint James en Londres. Pero más curioso aún es que en el año 1840 se casaría con la inglesa María Rynd, esta última era sobrina consanguínea del Primer Ministro Británico Lord Palmerston, un aristócrata. Me parece muy interesante que el Presidente de Bolivia durante la Guerra del Pacífico haya tenido una relación cercana con el Primer Ministro británico Lord Palmerston, y que la sobrina de este último haya sido la Primera Dama de Bolivia justamente en el periodo de guerra. El nieto del Presidente Domingo de Guerra también fue Presidente de Bolivia, su nombre era José Gutiérrez Guerra, educado desde la infancia en Inglaterra. José Gutiérrez Guerra fue Presidente de Bolivia en la Primera Guerra Mundial. Es muy posible que haya existido una influencia inglesa en Bolivia durante la Guerra del Pacífico a traves del Presidente Domingo de Guerra y de algunos políticos y empresarios bolivianos.
¿Qué más podrías contarnos sobre Lord Palmerston?
Edgar Oblitas en su obra La Historia Secreta de la Guerra del Pacífico cita a Lord Palmerston quien al referirse a una posible guerra entre Bolivia, Perú y Chile habría dicho: “Lo hago bajo mi responsabilidad. Además, Inglaterra es lo suficientemente fuerte como para cagarse en las consecuencias”. No me extrañaría una frase así de cualquier Primer Ministro británico en el siglo XIX. Palmerston siempre tuvo la idea de que Inglaterra sea un Imperio Mundial. Es indiscutible también la relación de Palmerston con Benjamin Disraeli quien a su vez también fue Primer Ministro británico. Disraeli fue Primer Ministro en 1879 cuando estalló la Guerra del Pacífico, eso es realmente curioso. Pienso que hace falta estudiar la política exterior de Palmerston y Disraeli hacia América Latina en el siglo XIX.
¿Consideras que esta investigación dará que hablar?
No es una investigación novedosa en lo absoluto, pero es un aporte más a una historia secreta de la Guerra del Pacífico, como la llamó Edgar Oblitas en su libro La Historia Secreta de la Guerra del Pacífico. Mi pasión en este momento es la historia. Mi interés es que la gente se cuestione, que se pregunte sobre la historia oficial, que considere que hay mucha información por revelar. En todo caso, estoy seguro que el pueblo boliviano estará ansioso de escuchar algo diferente, algo que permita comprender mejor la historia de la Guerra del Pacífico, ojalá sea así también en Chile, Perú y sobre todo en Inglaterra.
julio 22, 2015.
Fuente: https://www.elciudadano.cl/politica/la-guerra-del-pacifico-fue-concebida-en-londres-segunda-parte/07/22/#ixzz5AuBi6iBi
El rol clave de los Edwards en la Guerra del Pacífico y el conflicto que arrastran Chile y Bolivia.
Según el libro de Víctor Herrero: «Una biografía desclasificada del dueño de El Mercurio: Agustín Edwards Eastman«, Editorial Debate, Santiago, noviembre 2014.
por Macarena Segovia/ El Mostrador.
La demanda de Bolivia contra Chile en la Corte Internacional de La Haya tiene su origen en la denominada «Guerra del Guano y el Salitre» de 1879, en la que nuestro país adquirió el territorio de Antofagasta, el cual era boliviano y le daba salida al mar a dicho país. La guerra se inicia luego de que Bolivia decidiera implementar un impuesto a la extracción de salitre en sus tierras, por parte de empresas extranjeras, una de las cuales era la Compañía de Salitres y Ferrocarril de Antofagasta, de la que la familia Edwards era dueña de más del 40%.
El fallo de la Corte Internacional de la Haya de la semana pasada (24 de septiembre de 2015, nota del Editor CT) –en el que por 14 votos contra 2 decidió declararse competente ante la demanda marítima presentada por Bolivia contra Chile– trajo consigo múltiples celebraciones y una declaración de victoria por parte del país vecino, mientras que en nuestro país la Presidenta Michelle Bachelet fue tajante en decir que «Bolivia no ha ganado nada» y que la soberanía de nuestro país no está en juego.
Es así como a 136 años del origen de ese conflicto, en La Guerra del Pacífico, no se logra llegar a un acuerdo respecto a la demanda de Bolivia, que indica que tiene derecho a una salida al mar, a pesar de que perdió el territorio en dicha cruzada, la que es conocida como «Guerra del Guano y el Salitre», ya que se inicia luego de que Bolivia decidiera implementar un impuesto a la extracción de salitre en sus tierras, por parte de empresas extranjeras, una de las cuales era la Compañía de Salitres y Ferrocarril de Antofagasta, de la que la familia de Agustín Edwards era dueña de más del 40%.
Esta es la historia de cómo Agustín Edwards Ossandón –bisabuelo del actual dueño de El Mercurio– jugó un rol preponderante de «lobby» político y empresarial para que se desencadenara la Guerra del Pacífico, la que es relatada en Una biografía desclasificada del dueño de El Mercurio: Agustín Edwards Eastman, de Víctor Herrero.
Edwards Ross el bisabuelo de la impronta político-empresarial y de medios
«Agustín Edward Ossandón fue el creador de la inmensa fortuna de los Edwards, pero fue su hijo Agustín Edwards Ross quien catapultó a la millonaria familia de provincia hacia los más altos círculos del poder político y social chileno», así describe Víctor Herrero, en su biografía desclasificada del dueño de El Mercurio, al bisabuelo de Agustín Edwards Eastman y segundo Agustín de una dinastía que comprendió perfectamente el juego unificado entre el dinero, la política y los medios de comunicación.
Según el libro, Edwards Ross, «El cucho», fue quien se dio cuenta de que «el mundo político no solo servía para articular los intereses económicos de su familia, sino también para ganar prestigio (…) la generación de los primeros herederos ambicionaba ya no solo riquezas, sino poder».
«En pocos años, este nuevo Agustín Edwards se convertiría en uno de los principales protagonistas en tres grandes acontecimientos históricos que, hasta cierto punto, repercuten hasta nuestros días: la Guerra del Pacífico de 1879, la Guerra Civil de 1891 y la creación de una prensa moderna y con una influencia nunca antes vista en el país», agrega Herrero.
De acuerdo al texto, la generación de los financistas y banqueros que se enriquecieron gracias al auge de la minería de mediados del 1800 «ejercía una enorme influencia sobre el aparato fiscal y el Gobierno del país, pero lo hacían preferentemente desde las sombras». Es más, Agustín Edwards Ossandón –el primero de la dinastía– fue electo diputado por Valparaíso en 1891, pero no ejerció su labor parlamentaria, ya que el fin era acceder al fuero parlamentario, «que los protegía de investigaciones judiciales».
En cambio, Agustín Edwards Ross, militante del Partido Nacional, da un giro a esta tónica, desde joven tenía otra visión, por lo que fue quien por primera vez esbozó la filosofía política y económica que ha marcado a su familia y de cierta manera el destino de Chile: la riqueza se genera por el esfuerzo individual, el Gobierno debe garantizar la libertad, «que promueva este impulso empresarial» y que el Estado debe garantizar el orden legal para que se desarrollen los negocios.
Además, los elementos de la «ética protestante y espíritu del capitalismo» están muy presentes en estos discursos de Agustín Edwards Ross. «Dios ayuda a los que se ayudan a sí mismos», fue el título de una de las exposiciones que realizaba en la época en distintas escuelas.
Rol desencadenante en la Guerra del Pacífico
Un año después de la muerte de su padre, en 1873, Edwards Ross tuvo un papel fundamental, hasta «desencadenante» de la Guerra del Pacífico. Ese año asumió la presidencia de la «Compañía de Salitres y Ferrocarriles de Antofagasta», de la cual su familia tenía el 42% de las acciones. «Agustín Ricardo, de veintiún años, envió a un emisario a La Paz para gestionar con el Gobierno de Bolivia el reconocimiento de los derechos y concesiones de esa compañía para explorar y exportar salitre en amplias zonas de la región de Antofagasta que entonces pertenecía al país vecino», lo que fue concedido, pero nunca ratificado por el Congreso de Bolivia. Luego, en 1878, la Asamblea Constituyente boliviana aprobó sin problemas el establecimiento de un impuesto de diez centavos al quintal de salitre exportado, lo que desencadenó la ira de los empresarios chilenos, entre ellos Edwards.
La Compañía de Salitres y Ferrocarriles de Antofagasta se negó a pagar este impuesto, 9 meses después el prefecto de Antofagasta ordenó la aprehensión del gerente general de la empresa de Edwards, estando solo dos meses detenidos. Pero no todo estaba zanjado, en enero de 1879 La Paz aprobó un decreto para confiscar los bienes de la empresa y anunció el remate de estos, con lo que las faenas de Salitres y Ferrocarriles de Antofagasta se detuvieron. En paralelo, el Gobierno chileno de Aníbal Pinto también desplegó sus cartas. Los empresarios llevaban tiempo presionándolo para que interviniera, aunque un conflicto fronterizo mantenía la atención de las autoridades nacionales, pero la posibilidad de un remate de una empresa chilena levantó las alarmas y el presidente envió al buque Blanco Encalada a las costas de Caldera. Cuatro días después, este ancló en Antofagasta.
En paralelo el representante en Chile de Gibbs & Sons –también dueños de la Compañía de Salitres y Ferrocarriles de Antofagasta– escribió a sus superiores en Londres, con el objetivo de dar a conocer la estrategia zanjada tras una reunión de accionistas. En la misiva se recomendaba «gastar algún dinero para estimular a periodistas en los diarios para que publiquen artículos de naturaleza patriótica», lo que efectivamente ocurrió –como relata el libro– y en los diarios El Ferrocarril y Los Tiempos se publicaron textos de corte nacionalista.
Finalmente la jugada política y militar de Chile llegó, y justo cuando la Compañía de Salitres y Ferrocarriles iba a ser rematada en Antofagasta (14 de febrero de 1879) las tropas chilenas desembarcaron en el puerto de dicha ciudad. De esta forma, Agustín Edwards Ross salvó a su empresa de ser rematada y fortaleció su poder económico y de manipulación política.
Dos semanas después del arribo en Antofagasta, Bolivia, junto a Perú, declaró la guerra a Chile. «El conflicto bélico duraría un poco más de cuatro años y causaría unos catorce mil muertos», detalla el libro.
Pero el accionar de Edwards y las conexiones del mundo político con el sector económico eran evidentes. Según Víctor Herrero, «llama la atención que tres de los cinco ministros que conformaron el primer gabinete de guerra chileno eran accionistas minoritarios de la Compañía de Salitres y Ferrocarril de Antofagasta. Ellos eran Antonio Varas, ministro del Interior; Domingo Santa María, ministro de Relaciones Exteriores, y Jorge Huneeus, ministro de Justicia».
Otra operación que es develada por el libro es que, pocas semanas después de que estalló la guerra, apareció ante el notario de Antofagasta el estadounidense Charles C. Greene, el nuevo gerente de la Compañía de Salitres y Ferrocarril», ¿el objetivo? Pedir el permiso, a nombre de 21 empleados de la empresa, un permiso ante notario para explorar yacimientos en la zona ya ocupada por Chile. Luego fueron inscritas «51 tacas de salitre a nombre de los empleados», los que no pagaron nada por el procedimiento y que el siguiente año cedieron sus derechos a la Compañía de Salitres y Ferrocarril, de la cual Edwards Ross era director.
Treintaiún años después la operación salió a la luz: un civil levantó una denuncia por posible fraude al fisco, pero este no se hizo parte y, ya en la Corte Suprema, la Compañía de Salitres y Ferrocarril contrató como abogado a Luis Barros Borgoño, ex relator de la Corte y quien luego sería Vicepresidente de la República, el que finalmente hizo que la empresa ganara la demanda, esto a pesar de las repercusiones mediáticas y de protestas obreras. El fallo era descrito «como un ejemplo de cómo la oligarquía y el Estado confabulan para favorecer los intereses de los grandes empresarios», relata la biografía.
Es a raíz de estas operaciones que «Agustín Edwards Ross sacó dos lecciones valiosas del conflicto de 1879. La primera era que las guerras victoriosas son un negocio muy rentable y, la segunda, que la prensa es un factor clave en formar una opinión pública favorable a los intereses propios».
El segundo aprendizaje fue fundamental para la política comercial de la familia Edwards: para generar una real influencia en el país había que mezclar los intereses políticos con los económicos y la «herramienta crucial para lograrlo era la prensa», escribe Herrero. Es así como en 1882 Edwards Ross compró el diario La Época y luego, en 1882 o en 1884 –no está clara la fecha– compró El Mercurio de Valparaíso.
«Con el término de la Guerra del Pacífico, Agustín Edwards Ross emergía como una de las figuras más poderosas de Chile. No solo había logrado expandir la vasta fortuna familiar, sino que ejercía también una enorme influencia empresarial y política. Los Edwards, que habían hecho fortuna en las inhóspitas y polvorientas ciudades y pueblos del Norte Chico, se instalaban ahora cada vez más cerca del centro mismo del poder», señala la biografía desclasificada del dueño de El Mercurio.
Es así como el joven Agustín Edwards Ross, de 21 años, bisabuelo de Agustín Edwards Eastman, el actual dueño de El Mercurio, cumplió un rol fundamental en la denominada Guerra del Pacífico, la que dio origen a la pérdida de la salida al mar de Bolivia y que hoy tiene a Chile enfrentando un juicio ante la Corte Internacional de La Haya, el que podría durar hasta cuatro años más.
28 septiembre, 2015
Fuente: http://www.elmostrador.cl/noticias/pais/2015/09/28/el-rol-clave-de-los-edwards-en-la-guerra-del-pacifico-y-el-conflicto-que-arrastran-chile-y-bolivia/
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