Alameda Memoria enjuicia a José Menéndez, el “Rey de la Patagonia”.
por Diario Uchile.
El grupo abre una nueva versión de Santiago Off con una cantata que cuestiona al empresario español que se convirtió en un personaje histórico del sur de Chile.
Anexo CT:
El extermninio de los selknam.
Los selknam habitaban desde nueve mil años antes la Isla Grande de Tierra del Fuego y desaparecieron a causa principalmente de las persecuciones de las que fueron objeto por parte de los ganaderos. De acuerdo a un estudio hecho por Clara García Moro “Reconstrucción del proceso de extinción de los selknam», a través de los libros misionales, un 50% de los indios pereció en las misiones a consecuencia de enfermedades infecciosas que les contagiaban los mismos religiosos, del restante, un 20 % por violencia intragrupal, un 15 % por mestizaje y aculturación y un 15 % por enfrentamientos o acciones punitivas.(Anales de la Patagonia). Cuando Julio Popper llegó a la Isla Tierra del Fuego se produjeron las primeras denuncias de matanzas, por lo que los padres salesianos fundaron la misión San Rafael en isla Dawson para protegerlos. Se les pedía una libra esterlina para su manutención. La relación de Menéndez con la tragedia selknam es por una matanza de unos 17 indios que efectuó, siguiendo sus instrucciones, el administrador de la Estancia Primera Argentina, Alexander Mac Lennan en 1897.
Fue el historiador regional Mateo Martinic quién publicó una carta estremecedora de uno de los empleados de la estancia Primera Argentina, el escocés James Robbins, que en 1898 escribía a un amigo:
[…] tenemos quince soldados aquí cuyo deber es cazar indios. Ocho de nosotros salimos de aquí una noche y viajamos al sur, pasado Punta María, con un indio que nos guía, llegamos al punto más cercano al campamento indio, dejamos los caballos y caminamos una hora y veinte minutos a través del monte y pillamos alrededor de setenta. Voy a correr el velo sobre los siguientes cinco minutos y dejarlo que suponga el resto.
Sin embargo, el principal «cazador de indios» fue el escocés Alexander Mac Lennan, administrador de la estancia Primera Argentina, apodado Chancho Colorado porque era de tez rosada y rubio de cabello, el cual proponía su particular solución final para el asunto indígena: «mejor es meterles una bala».
Mac Lennan fue el organizador de la matanza de Cabo Peñas, donde sus hombres y él, armados con rifles de repetición, prepararon una emboscada encerrando a hombres, mujeres y niños contra el acantilado donde hoy se halla ubicado el faro, muriendo entre 14 y 17 indígenas. Alexander Mac Lennan se retiró en 1907 tras doce años trabajando para José Menéndez Menéndez como administrador y mayordomo de sus estancias en Tierra del Fuego. Los salesianos de la cercana misión de Nuestra Señora de la Candelaria de Río Grande, fundada en 1893, también fueron testigos de los asesinatos de indígenas, como acreditan distintas entradas en el diario de la misión, como la correspondiente a enero de 1897: «varios empleados de la hacienda de Menéndez mataron a un grupo de hombres indios y las mujeres las condujeron a la misión: bautizamos a las muchachas». José Menéndez tuvo una polémica con Monseñor Faganano en la que acusaba a La Misión Salesiana ”de ser un refugio y nido de ladrones por los robos de ovejas que hacían los indios de la misión». Allí señalaba: «Los pobladores solemos llevarles catecúmenos,pero nos cobran los misioneros una libra esterlina por cada uno y treinta centavos pagados por adelantados».(José Manuel González Tabanera «El emigrante asturiano José Menéndez»)
El resultado de estas sangrientas persecuciones y cacerías fue el exterminio del pueblo selknam, que contaba con entre tres y cuatro mil individuos hacia finales del siglo XIX y que, veinte años después de la puesta en marcha de las estancias, desaparecieron completamente de la faz de su territorio.
La historiografía actual señala a José Menéndez y al resto de los estancieros de Tierra del Fuego (Mauricio Braun, y José Montes) como los principales causantes del exterminio de todo un pueblo, ya que los selknam desaparecieron a partir de la instalación de las primeras estancias ganaderas. Además, el principal asesino de indígenas, Alexander MacLennan, fue empleado de José Menéndez, de quien recibía órdenes directas. Los intentos de desvincular las acciones de MacLennan de las instrucciones de José Menéndez, indicando que el escocés actuaba por su cuenta, no se sostienen ya que fue administrador de la estancia «Primera Argentina» durante doce años y, cuando se jubiló, Menéndez le regaló un valioso reloj de hora en reconocimiento de sus servicios.
José Menéndez falleció el 24 de abril de 1918, a los 71 años, en Buenos Aires, donde poseía residencia al igual que en Punta Arenas. Por deseo expresos de sus hijos, fue sepultado en el cementerio de Punta Arenas, lugar que lo vio crecer como pionero del desarrollo económico patagónico.
Fuente (extractos): https://es.wikipedia.org/wiki/Jos%C3%A9_Men%C3%A9ndez_Men%C3%A9ndez
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