Pensiones de Carabineros son 3,9 veces mayores a las pagadas por las AFP.
Las diferencias entre las cotizaciones de civiles y las de oficiales de Carabineros y del Ejército comenzaron el 1 de mayo de 1981, a causa de uno de los más cuestionados legados del dictador Augusto Pinochet -las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP)- y la postura en contra de involucrarse en estas por parte de las Fuerzas Armadas y de Orden.
Un estudio de la Fundación Sol, que se basa en los datos manejados por la Caja de Previsión de la Defensa Nacional (CAPREDENA) y la Dirección de Previsión de Carabineros de Chile (Dipreca), reveló las grandes diferencias entre las pensiones recibidas por las Fuerzas Armadas, y las entregadas al resto de los pensionados del país.
Los investigadores Recaredo Gálvez y Marco Kremerman, autores del análisis, descubrieron que CAPREDENA, institución que tiene como función principal el pago mensual de pensiones de retiro y montepío del personal en retiro de las Fuerzas Armadas, pagó 105.229 pensiones a diciembre de 2020, con un monto promedio de $826.192.
Además de consignar que los montos han aumentado un 27,2 % en términos reales en los últimos 15 años, la Fundación Sol reveló que se registran “diferencias bastante grandes” entre los estamentos que componen las FF.AA.
Mientras quienes se desempeñaron como oficiales reciben una pensión promedio cercana a $2 millones, quienes jubilaron en el Cuadro Permanente de las ramas del Ejército, registran una jubilación promedio de $739 mil.
Por otro lado, en diciembre de 2020, la Caja de Previsión pagó 70.779 pensiones de retiro, las cuales son por motivos de antigüedad e invalidez, por un monto promedio de $1.051.466.
Respecto a DIPRECA, a diciembre de 2020 se registran 68.956 pensiones pagadas, de las cuales 38.645 corresponden a pensiones de antigüedad y entre estas, el 75,5 % se concentra en Carabineros, 11,8 % en Investigaciones y 11,5 % en Gendarmería.
En ese sentido, la Fundación Sol consignó que el monto promedio pagado por el organismo fue de $1.179.566, observándose un valor mínimo en la institución de Carabineros con $1.072.936, y un máximo de $1.637.663 en Investigaciones.
Además, entre 2006 y 2020, el monto de las pensiones de antigüedad pagadas por DIPRECA ha incrementado en un 36,2 % en términos reales, pasando de $865.806 a $1.179.566. Al mismo tiempo, en Carabineros e Investigaciones se registra aumentos reales de 31,1 % y 30,4 % respectivamente. En Gendarmería, el aumento fue de un 73,5 %.
Comparando estas cifras, entre el monto de las pensiones recibidas por las personas jubiladas de las Fuerzas Armadas y de Orden y los civiles que han cotizado en el sistema de capitalización individual administrado por las AFP, los investigadores sentencian que “los resultados son concluyentes”.
Así, descubrieron que la pensión de antigüedad promedio de DIPRECA es 3,9 veces mayor a la pensión de vejez promedio que pagan las AFP y las Compañías de Seguros. Esta brecha llega a 4,7 si se compara con Gendarmería, y 5,4 veces comparándola con Investigaciones.
Por su parte, en el caso de CAPREDENA, la pensión de retiro promedio es 3,5 veces mayor que la pensión promedio de vejez pagada por el sistema privado. Si se compara con la pensión promedio que reciben los oficiales, la brecha alcanza 6,3 veces.
Los distintos sistemas previsionales
Estas diferencias entre las cotizaciones de civiles y las de oficiales de las FF.AA. comenzaron el 1 de mayo de 1981, a causa de uno de los más cuestionados legados del dictador Augusto Pinochet -las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP)- y la postura en contra de involucrarse en estas por parte de las Fuerzas Armadas y de Orden.
Carabineros y militares decidieron restarse de la reforma estructural impuesta por la dictadura militar, que sustituía completamente el sistema de reparto administrado a través de múltiples Cajas Previsionales en Chile, manteniéndose así las CAPREDENA y DIPRECA.
Según analizan los expertos de la Fundación Sol, lo anterior se debe a que “las fuerzas armadas no quisieron tomar los riesgos que la imposición de un sistema de cuentas individuales podría traer para sus propios cuadros”, situación en la cual se encuentra la población civil hasta la fecha.
Revisa aquí el estudio completo de la Fundación Sol:
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